Estuve la otra noche en la entrega del premio Azorín de la Diputación de Alicante y la editorial Planeta. Bien acompañado y buena cena. Como siempre jugamos a intentar acertar el ganador de esta edición, lógicamente sin conocer las obras y apostando ya no por autores sino por pseudónimos. Una quiniela complicada. Pero había que pasar la noche con algun entretenimiento, aparte de charlar con libreros y representantes de la editorial o de comentar como estaba Matilde Asesnsi, Angela Becerra, el maestro Sánchez Dragó, o mi querido Juan Eslava Galán, mientras tanto esperabamos la resolución del jurado. Tras cinco deliberaciones y votaciones una novela salió ganadora bajo título y pseudónimo que enmascaraba un autor importante para los amantes de la literatura: Roberto Montero González, "Manteca colorá", "Besos de fogueo", "Sed de champán" entre otras.
Montero Glez, como se le conoce, puño izquierdo en alto, se levantó inmediatamente de su silla para recibir los honores al premio recibido y agradeció a "la maría que me coloca" y a su representante el premio que se le otorgaba esa noche.
Bueno esperamos leer con ansia la novela "Polvora negra" que llevará bajo su título el honorífico nombre de Azorín, y trata sobre el intento de magnicidio de Alfonso XIII.
Dice Arturo Peréz Reverte que le gustaría escribir como lo hace el "cabrón" de Glez. A más de uno nos pasa eso y no es envidia. Enhorabuena.
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